De Francia 2019

Día 21

El día ha llegado, estos son los cuartos de final, a sólo tres pasos de la Copa, de la gloria. Noruega e Inglaterra buscarían continuar haciendo historia y ser mejores que el rival. El 'God Save the Queen' suena en Le Havre, donde miles de seguidores ingleses hacen sentir su canto como el rugido de un león, de tres leones. El equipo noruego se aferra a un sueño pero, el "equipo dela rosa" no es el mismo de cuatro años atrás. 

El equipo dirigido por Neville llegó a Francia entre críticas y dudas pero, el técnico inglés ha dejado claro que a veces se debe dar un salto de fe. Las leonas no necesitan tocar en demasía el balón, cuando sólo con tres toques ya pisan el área rival. Ni Minde, ni Reiten, fueron capaces de detener a la joven talentosa con el número '7' a la espalda. 

Parris logró entrar y salir por la banda derecha los noventa minutos de juego, y fue a través de ella como Scott y White lograron marcar los dos tantos que sorprendieran al rival. Inglaterra era ahora un equipo ofensivo, seguro en defensa y veloz al ataque, ésta no era la Inglaterra de hace unos días cuando con dudas había logrado vencer a Camerún. Sobre el final del primer tiempo Bronze, desde una jugada de tiro libre prefabricada, marcó desde fuera del área apenas abajo del travesaño; una jugada que puso de pie a Beckham y el resto del estadio. 

Durante la segunda mitad, el equipo nórdico fue incapaz de levantarse, y la ausencia de su mejor jugadora, Ada Hegerberg, se hizo notar; en momentos adversos son las grandes jugadoras las que marcan la diferencia pero, Ada tiene una lucha que combatir por la equidad antes de ganar un Mundial. Hoy Inglaterra se alza como hace cuatro años lo hacia su igual en Rusia, y nuevamente en las calles de Europa se canta: It's coming home, it's coming home...